¿Cuándo no debo usar la copa menstrual?

Si bien es cierto que la copa menstrual esta diseñada para que cualquier mujer que se sienta cómoda con ella cuando la use, hay dos situaciones en las que debes de evitarla, pues puede ser incómoda o molesta: en caso de tener una infección vaginal y durante el sangrado del posparto.

¿Por qué no debo usar la copa menstrual si tengo una infección vaginal?

Nuestra vagina es un ecosistema vivo con una microbiota diversa y delicada. Una infección en cualquier parte del área genital puede generar irritación e inflamación y debe atenderse para reequilibrarse antes de poner cualquier objeto en contacto con la vulva o la vagina. La presencia de algún patógeno (hongo, bacteria o virus) exige que adoptemos medidas de tratamiento integrales: cuidar nuestra alimentación, la hidratación del cuerpo y demás hábitos de vida, observar nuestros patrones mentales y emocionales y, en caso de ser estrictamente necesario, recurrir a medicamentos farmacéuticos recetados por un especialista: soluciones o pomadas tópicas; óvulos o por vía oral, etc.

En casos así, la copa menstrual podría llegar a complicar la infección al no permitir que el flujo menstrual fluya con libertad o inclusive puede causar molestia o dolor debido a la hinchazón de los órganos.

Cuando el cuerpo supere la crisis, y una vez que el médico te dé de alta, podrás retomar con confianza el uso de tu copa menstrual, observando las precauciones higiénicas habituales de esterilización y limpieza. Recuerda que por su silicón de grado médico y sus características, Angelcup es 100% hipoalérgenica y biocompatible.

¿Y qué pasa con el sangrado del postparto?

El abundante sangrado vaginal que en muchas mujeres se presenta después del nacimiento de un bebé no es menstruación. En realidad se llaman loquios y es una excreción vaginal que contiene sangre, tejido placentario y otros fluidos. Dura aproximadamente 15 días, y tiene un volumen muy superior comparativamente con la cantidad de flujo de la menstruación. 

Durante este periodo después del parto, llamado “puerperio”, generalmente no menstruamos sino hasta que se restablece nuestro ritmo hormonal regular, lo que suele tardar entre tres y 18 meses después del nacimiento del bebé. Debes estar a la escucha de tu cuerpo para sólo volver a usar la copa cuando tu canal vaginal no tenga nada de inflamación ni malestar. Sobre todo si tu parto fue en hospital, puede haber heridas asociadas a algún desgarre o al corte de  la episiotomía que deben sanar y será necesario mantener la zona genital libre de dispositivos que puedan incomodar la vulva, la vagina o el útero a lo largo de su recuperación.