La relación entre la danza árabe y la salud pélvica
— Con tan solo un mes de practicar bellydance, notaremos una mejoría en la elasticidad de los músculos de nuestra pelvis, veremos que nuestros movimientos son más amplios y con mayor facilidad.
— Además, aprenderemos movimientos que masajean el psoas, el abdomen, las caderas y todos los órganos que se encuentran en el interior de nuestro vientre. Esto nos ayudará enormemente para aliviar los dolores que se presentan antes, durante y después de nuestro periodo.
— El ejercicio estimulará el movimiento de fluidos, favorecerá la circulación sanguínea y ayudará a irrigar oxígeno en la zona pélvica.
— Los músculos del periné se fortalecerán y ayudará a prevenir el descenso de la vejiga y, por ende, la incontinencia urinaria causada por debilidad muscular.
— Después de un parto, se recuperará mejor el suelo pélvico, y tras una cesárea, nuestro abdomen.
— Se mejora la recuperación en el área de la vagina tras una cirugía, pues la danza árabe, al fortalecer los tejidos y un tejido, permite una pronta recuperación.
— El movimiento ondulatorio de la pelvis estimula los intestinos, con lo cual mejora su funcionamiento y a aliviar el estreñimiento.
Como todo, los resultados dependen de cada mujer. Lo que sí es cierto es que la combinación de descanso, ejercicio regular y alimentación saludable pueden mejorar enormemente nuestra salud pélvica.